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 Girolamo Santacroce

Napolitano



Una infelicidad grandísima es la de estos talentos divinos, que mientras más valerosamente se impulsan trabajando, la inoportuna muerte les trunca el hilo de la vida, sin que el mundo pueda terminar de ver sus frutos maduros que la divinidad del cielo los ha concedido en sus obras que tienen hechas, que, aunque pocas, logran hacer salir del pecho de los hombres un infinito suspiro, cuando tanta perfección se ve y comprueba en ellas,
en pensar también, que sin tener madurado el juicio, y ejercitada su ciencia con más práctica y con estudio ejercitado, y haciendo aquello en edad juvenil, mucho más habría hecho si no se hubiera truncado su vida como vemos en el joven Girolamo Santa Croce como se comprueba por sus obras de escultura en Nápoles, que con esa ternura fueron conducidas y terminadas, que se puede ver el deseo de un joven que quiere con mucho avanzar sobre los viejos de antes que tienen renombre o hayan tenido el principado en una ciudad durante muchos años.

Como es verdadera prueba en San Giovanni Carbonaro de Nápoles, la capilla del Marqués de Vico , que es un templo redondo, dividido en columnas y nichos, y dentro sepulturas con mucha diligencia trabajadas.

Está de mano de un español (Bartolomé Ordoñez, #) una tabla de mármol, de mediorrelieve, con la ofrenda de los reyes Magos. Y Girolamo les hizo de gran relieve en un nicho a un San Juan (#), en el cual mostró para rivalizar, no ser inferior y tener un espíritu más seguro, y en la obra con tanto amor la impulsó, que habiendo subido alto creció mucho su fama. De manera que en Nápoles donde se consideraba como escultor maravilloso y de todos el mejor a Giovanni da Nola, ya viejo, pero que hizo infinitas obras trabajadas para Nápoles, ya que en esta ciudad, muchos tienen por costumbre de hacer las capillas, de mármoles trabajados, y lo adornan con él.

Tomó Girolamo por competencia a Giovanni al hacer una capilla en Monte Oliveto de Nápoles, en la puerta de la iglesia, a mano izquierda entrando en la iglesia (#), y otra hizo en la otra banda Giovanni de Nola (#), con la misma composición que aquél. Quiso hacer Girolamo a la virgen de tamaño natural, toda en gran relieve, que se tiene por muy bonita figura; con infinita diligencia en los tejidos, manos y las perforaciones de trasladarse el mármol, conducidas con mucha perfección que realmente mereció estar por encima de todos los que en Nápoles manejan los cinceles para trabajar el mármol. Hizo aún un San Juan y un San Pedro, figuras muy bien pensadas, y con admirable manera trabajadas del mismo modo, propiamente terminadas, y algunos niños que están por encima. Este trabajo fue la causa de elevarlo al cielo en el renombre, que meritorio le concedieron los autores y todos los señores napolitanos.

Hizo otras en la iglesia de Cappella (Abbazia di Santa Maria a Cappella Vecchia) dos grandes estatuas de todo relieve muy bonitas; a continuación comienza una estatua de Carlos V Emperador, luego de volver de Túnez; y esta esbozada y repasada en algunos lugares de gradina. Pero la inicua fortuna, envidiosa de la gloria de Girolamo, por mano de la muerte, se vengó contra tanta virtud, sin reparar en que no había vivido más de 35 años. Quien lo conoció, su muerte le dolió mucho, ya que esperaban que sí había superado a sus compatriotas, aún tenía que sobrepasar a cada autor del mundo.

Y tanto más lamentaron la muerte de Girolamo, cuánto que todo era modestia, humanidad, amabilidad y talento, con extraordinario influjo del cielo y de la naturaleza dotado. Todo ello lo adornan pudieron tanto en él, que quien habla de el, lo hace con tal afecto, que siempre de lengua en lengua será recordado como por las pocas de sus obras que hizo y con tal afecto suspiraba, que podrá decirse que murió siendo muy feliz, así como vivo se le consideró singular.

Sus últimas esculturas se hicieron el año 1537 año de su muerte, que fue en Nápoles, y donde le dieron exequias y fue enterrado. Y con el tiempo le hicieron este epitafio:

LA MALA MUERTE ENVIDIOSA
POR LA ETERNIDAD DE SUS ESTATAS EN SANTA CROCE
PARA QUE ESTAS ESTATUAS NO CONTINUARA HACIÉNDOLAS ETERNAS
LE RETIRÓ EN EL MISMO PUNTO A ELLAS Y A EL LA VIDA.

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